Qué más se puede decir que ya no se haya dicho de ese día. De la convocatoria del Bambi una semana antes en Fútbol de Primera, porque "Independiente es un grande" y "quiero que 25, 30 mil personas acompañen a San Lorenzo"..."si se da, se da"...y se quedó corto maestro, porque fuimos más de 35 mil los cuervos que copamos el Gigante (pero de verdad, no como los 40 mil de Ñuls...) Fue una ciudad tomada, tanto que hasta el monumento a la bandera tuvo la azulgrana en su ventana...
Y se dio nomás...porque tenía que darse...porque lo merecía el grupo, el equipo, que había sido el mejor del torneo, compitiendo con un duro Gimnasia que siempre sacaba buenos resultados sobre la hora...Pero sobre tod

Se gritó el gol de Mazzoni, glorioso Tanque para cuervos y pinchas...Se sufrió el penal de Javi Netto, motor de ida y vuelta importantísimo para equilibrar aquel mediocampo fantástico, junto al Conde Galetto, el Diablo Monserrat y Paulo Silas, el mejor jugador que he visto con nuestra camiseta...Se deliró con el gol del Gallego, eterno goleador que aún sigue demostrando que por San Lorenzo sintió un amor especial, distinto al de las otras casacas que vistió...
Porque con el Gallego saltó el Pampa Biaggio, otro grande que nos hizo quedar afónicos tantas veces...Saltó el Flaco Passet, como tantas veces para salvarnos, aunque muchos no lo quieran reconocer...Saltaron el Cabezón Ru
Saltamos todos...los que habíamos viajado a Rosario y los que se quedaron en San Juan y Boedo...Porque ese gol fue la gota que rebalsó tanta locura contenida, tanta bronca juntada...Porque ya nada nos iba a quitar ese título, ni Gimnasia, ni River, ni Ñuls, ni nadie...ningún fantasma iba a aparecer por Arroyito...
Llorá cuervo, así como llora el Bambino...no aguantes más. Saltá, llorá, gritá...cantá bien fuerte cuervo, no tengas miedo...¡¡QUE DE BOEDO SALIO EL CAMPEON!!