
Diegote lo merecía más que nadie. Porque él como nadie siempre dio todo por la Selección e hizo que todos fuéramos sus hinchas.
Por eso está bien que el cargo sea para él. Después de tantos fracasos y tan pocas alegrías, los responsables de nuestro último festejo tendrán su chance.
Y si eso lo hace feliz a él, también nos hace felices a todos. Suerte maestro y feliz cumpleaños!!
La hinchada más pimpante del fútbol argentino