
Unos pocos metros antes de llegar al tramo final que conduce a las boleterías, llegaron las malas noticias de los socios que volvían enfurecidos y sin popular. De ahí en más el caos. Todos corriendo a insultar a los vendedores (al pedo, pero son la cara que se pone ante al socio) y a tratar de conseguir una platea (los que contaban con el dinero, claro), del remanente que quedó de la pre-venta del jueves y viernes.
Acá viene el primer punto en cuestión: LA PREVENTA DE ENTRADAS, SEAN POPULARES, PLATEAS O PALCOS VIP, DEBEN SER SOLAMENTE PARA SOCIOS CON CUOTA AL DIA. Y, de ser posible, para socios con cierta antigüedad y no para golondrinas que se asociaron hace una semana porque el equipo anda bien. En clubes serios que suelen agotar entradas (como Estudiantes, por ejemplo) no se venden entradas para no socios, salvo que quede un remanente a dos horas de cerrar la venta (por ejemplo, el sábado a la tarde o el domingo a la mañana). ¿Por qué San Lorenzo vendió parte de las plateas a no socios, sabiendo que muchos socios se iban a quedar sin popular el sábado y tal vez querían sacar una platea? Inentendible.
Ahora el segundo punto (y más grave): LA REVENTA DE ENTRADAS POR PARTE DE LOS PROPIOS "HINCHAS DE SAN LORENZO" YA ES ALARMANTE. Es imposible que se hayan vendido 4.500 entradas, al ritmo que se estaban vendiendo, en el tiempo que estuve en la cola y por la cantidad de gente que había. En verdad la palabra reventa, en este caso, estaría mal utilizada. Porque no es la clásica reventa de alguien que compro el ticket a un valor y quiere obtener una ganancia por eso, sino que los que venden son los que tienen entradas de favor (y no me refiero solamente a la hinchada, sino también a muchas de las peñas y agrupaciones que reciben entradas por parte de los dirigentes). Es común ver por los alrededores de la cola y luego dentro del mismo club, a varios personajes ofreciendo entradas por un valor bastante superior al que se venden por boletería (teniendo en cuenta que ellos no pagaron nada por las mismas).
Pero si pretendemos que nuestra inútil dirigencia tome alguna decisión al respecto, estamos en el horno. Sería bueno que aflojen con la entrega de entradas de favor, tanto a barra, como a estas agrupaciones que terminan haciendo negocio. Seguramente esto pasa en todos los clubes, pero acá, con el equipo puntero, el negocio se triplica, así como también la entrega por parte de los responsables.
También es hora que apliquen algunas acciones para la venta de entradas (más allá de que sigue siendo inentendible que se vendan en Varela, sin seguridad hasta las 7 de la mañana y con los socios librados al azar). El ránking de socios bostero es probablemente inaplicable en mentes ineptas como las de nuestros dirigentes. Pero es muy injusto que los que vamos a todos lados, vaya bien, mal o regular el equipo, que hemos ido a Bahía Blanca, Tres Arroyos, Santa Fe o Mendoza, a ver equipos penosos y jugadores desganados, tengamos que comernos estos garrones para conseguir una popular, porque muchos se acordaron de que son hinchas del Ciclón ahora que vamos primero. Cada vez estamos yendo más temprano a sacar una entrada y no están dando muchas más opciones que la de colarse con algún conocido adelante, cosa que seguramente no está nada bien.
Pero hay otra opciones además del ránking. Ofrecer al socio que va siempre a la cancha, la posibilidad de que compre, en forma anticipada, un paquete con todas (todas) las entradas para partidos que se jueguen como visitantes. A La Boca, Avellaneda, Rosario, Mendoza o dónde sea. Que compre todas y si después no puede ir, que se la ofrezca a otro socio o que se la guarde de recuerdo. Esos paquetes tendría que reservarlos el club a la hora que los rivales entreguen las entradas para los partidos, enviando el ticket a cada socio que adquirió el paquete. ¿Es muy difícil?
¿No les gusta? Les propongo otra: Un par de flacos, acompañados por bastante seguridad, que se hagan presentes en el sitio de venta a la hora que empieza a llegar el público a la cola. Los mismos tendrían que entregar un número a cada uno que va llegando a la cola e ir corriéndose hacia el final de la misma para seguir entregando a los que van llegando. Así se evitaría que la gente se meta adelante y se lograría que cada uno que está haciendo la cola se asegure el ticket. Sin número no hay entrada. Claro que ahí viene otro tema, los números "deberían" coincidir con la cantidad entregada por los locales (por ejemplo hoy, debería haber números del 1 al 4.500), lo que haría muy evidente la cantidad entregada en entradas de favor. ¿Qué pasa si el último número que entregan es igual a la mitad de lo que daba el local?...¿Dónde estará el resto, no?
En fin, muchas ideas aplicables, pero que ninguna se aplica o se aplicará en San Lorenzo. Esperaba leer algo de esto en alguno de los sitios más famosos, pero se ve que están ocupados en otras cosas mucho más importantes que no vienen al caso. O será que no sufren la odisea de conseguir una entrada para ver a San Lorenzo (cuando el equipo anda bien, claro).
Claro que todo no terminó hoy, ya que la semana que viene llega Boca y la historia será mucho peor, porque las entradas seguramente no serán ni un tercio de lo que fueron para Racing. No espero que esto cambie de acá al sábado que viene, sino que seguramente (gracias a dos victorias cuervas) la cosa va a empeorar bastante.
Sólo quisiera que se terminen estos negocios turbios, de los supuestos hinchas más representativos, y que la fiebre por ir a la cancha continúe cuando el equipo no va primero. PERO TODO ES MUY UTÓPICO (¿me estaré contagiando de otras webs?)